Los efectos del coronavirus en la economía de la República Popular China
Axel Martínez Betanzos

Tecnología y Economía  //  Nº3, Marzo, 2020

A raíz del brote del COVID-19, vulgarmente llamado coronavirus, en la provincia de Wuhan a finales del año 2019, en el marco de las celebraciones del año nuevo chino, se ha creado una ola de pánico en los multimedia internacionales debido al esparcimiento epidemiológico que se dio con gran rapidez, lo que generó una serie de medidas de restricción como la de los viajes al extranjero y entre las provincias, que se aumentarán las vacaciones, que se suspendieran clases así como actividades en los centros de trabajo, e incluso la de tener contacto con otras personas. Este evento se convirtió en una amenaza de consecuencias mundiales.
   
Al exterior de China se dio pie a una serie de restricciones al turismo de china, como que las personas que regresaban a sus países provenientes de la nación asiática fueran en muchos casos puestas en cuarentena, con el objetivo de no propagar el virus, que se cancelaron vuelos provenientes de China, así como que se bloquearan embarcaciones y mercancías provenientes del gigante asiático.
    
Esta no es la primera vez que China atraviesa por una crisis sanitaria, recordemos la más cercana que fue la HN1 o influenza en 2005, en donde las políticas sanitarias y de restricciones buscaron que no se generara una epidemia mundial, situación que nuevamente el Gobierno chino busca frenar, e incluso ha generado un cerco en la Provincia de Wuhan, lugar desde donde se propagó el virus.
    
​Todo esto ha tenido repercusiones en diversos ordenes, desde lo  político, lo sanitario, la seguridad nacional e internacional y por supuesto en el ámbito económico y financiero de China, ya que por las diversas estrategias de contención que se tomaron, las empresas tuvieron que bajar su ritmo e incluso suspender actividades, siendo bien conocido los tumultos de personas que laboran en dichos espacios para la creación en masa de mercancías desde productos textiles hasta de alto valor agregado como lo son las mercancías tecnológicas. Sumado a esto el miedo a viajar en transporte público, así como el exceso de demanda de servicios de salud, como son medicinas, médicos y hospitales, han puesto a China en una crisis como nunca en su historia moderna se ha visto.

El Coronavirus y la crisis de salud
A principios de diciembre del 2019 en la Ciudad de Wuhan en China se comenzaron a reportar una gran cantidad de personas con padecimientos respiratorios similares a una gripa común que generaron un cuadro de neumonía, muchos de ellos trabajadores del mercado de mariscos de dicha entidad, famoso por la venta de animales exóticos. Esto hizo que las autoridades generarán un cerco sanitario en dicho mercado, ya que muy probablemente el origen del virus podía estar en el contagio de un animal a un humano siendo un virus zoonótico (1), el cual afecta en mayor medida a las personas adultas mayores y a los muy jóvenes. La forma de infección del virus se da cuando se entra en contacto con las secreciones de una persona infectada. Los padecimientos que genera el COVID-19 son sumamente parecidos a un resfriado común pero en aquellas personas con un sistema inmunológico débil, se genera un cuadro de bronquitis o neumonía. 
    
Ya para la mitad del mes de diciembre China reporta ante la Organización Mundial de Salud (OMS) los casos de neumonía detectados, pero no fue sino hasta finales de diciembre que las autoridades municipales emitieron un aviso urgente de una neumonía desconocida hasta entonces. Con ello, las provincias y regiones fronterizas  comenzaron a generar mayor vigilancia en sus fronteras. Para enero de 2020 países vecinos comenzaron a hacer escaneos térmicos de los pasajeros provenientes de vuelos de China, mientras que otros más decretaron alertas de viaje para quienes visitaran la región de Wuhan. China descarta que el virus sea SARS o MERS (2). Es el 7 de febrero cuando las autoridades chinas identifican al virus como un nuevo coronavirus, siendo el 11 de enero el día en que se reporta la primera muerte relacionada con el virus.
    
Las alertas mundiales comenzaron a sonar, se empezaron a confirmar casos en Tailandia, Japón, así como al interior de China, en Beijing y Shenzhen, con lo que se reportaba ya una cifra de 139 casos para el 20 de enero. El virus se propagó a Corea del Sur, Taiwán y Estados Unidos, generando una histeria global ante un brote epidémico sin precedentes. América Latina, para finales de enero, comienza a tener sus primeros posibles casos en Colombia y México. Para el 24 de enero se corroboraron los primeros casos en Francia, y en Alemania para el 27 de enero. Se aumentaron las restricciones para viajar dentro de China y se cerraron los principales enlaces de transporte público así como autopistas. 
    
Para el 6 de febrero muere el médico Li Wenliang, que fue el  oftalmólogo que alertó del nuevo brote y se contagió mientras atendía a los pacientes. Wenliang trató de alertar a sus colegas sobre el brote, pero la policía china lo tildó de realizar comentarios y rumores falsos. Su muerte trajo consigo una grave crisis política al interior de China, por el mal manejo que tuvo el gobierno, debido a las acusaciones de persecución en contra del médico, lo cual inundó las redes sociales chinas con mensajes contra del gobierno de Xi Jinping (3). 
    
​Ya para finales de febrero el virus había entrado a Italia, Irán, Camboya, Australia, Brasil, México, Ecuador. En Irán se reportaban los primeros fallecimientos, incluido un ex-embajador que había estado en Italia, y se tomaron medidas como la liberación temporal de 54.000 presos con el fin de reducir el brote (4).

    Para los primeros días de marzo, de acuerdo con los últimos datos de la Comisión Nacional de Salud, el número de casos confirmados alcanza ya a 80.270 y un total de 2.981 personas murieron, mientras que 49.856 se recuperaron de la enfermedad. No hay un tratamiento aún que pueda hacer frente al virus. Se han comenzado a dar tratamientos experimentales, en España por ejemplo la aplicación de lopinavir/ritonavir, también usado para prevenir el VIH, ha dado buenos resultados en pacientes con coronavirus (5). Muchos países de la comunidad internacional han puesto sus manos a la obra para tratar de contener el virus, así como por medio de sus institutos de salud y de investigación poder conseguir un tratamiento que cure a los infectados, con ello se salvarían muchas vidas.

Globalización y epidemias
El fenómeno de la Globalización no cabe duda que ha ido interconectando el mundo, los mercados así como la mejora de la interconectividad e interconexión de las diversas regiones del globo. Las  personas pueden trasladarse con mayor facilidad, así como las mercancías, pero esto ha también generado graves peligros, como la fácil transmisión de virus y epidemias. Aunado a esto, la grave desigualdad, la pobreza y el cambio climático que ha generado la globalización son catalizadores de diversas enfermedades (6).
    
Esta realidad ha afectado a China, ya que se ha convertido en uno de  los países que más se ha insertado en el proceso de Globalización mediante su política de “un país, dos sistemas”, estrategia que le ayudó a convertirse en una de las principales economías del mundo, así como la fábrica global. Así mismo se fue posicionando como un referente del comercio internacional por su gran cantidad de exportaciones gracias a sus vastas regiones industriales que producen un sinfín de mercancías, aunado a esto la creación de grandes megaciudades y la interconectividad entre sus diversas regiones han puesto a China en grave peligro por el brote del COVID-19.
    
La Globalización ha facilitado el libre comercio, pero con ello las mercancías y las personas pueden llegar a propagar virus y generar graves epidemias. Desde 1980, década en que el proceso globalizador tomó mayor auge,  fue el año en el que el número de brotes epidémicos se triplicó (7). A esto hay que sumarle el deterioro del ambiente y el calentamiento global, así como la creación de armas biológicas, tema que se ha vuelto primordial en las agendas de seguridad nacional de varios países y China no es la excepción.

Efectos sobre la economía de China
El COVID-19 ha generado una gran variedad de efectos en el mundo, desde una crisis sanitaria, hasta crisis financieras a lo largo del globo, pero uno de los países que más ha resentido esto ha sido China, ya que en este bimestre del 2020 las medidas que el país asiático ha tomado, han dado en el corazón de la dinámica económica de China, el extender las vacaciones de año nuevo, las restricciones de movilidad así como laborales, que se han reflejado en el decremento de las exportaciones y en el crecimiento del PIB.
 
China uno de los principales proveedores a nivel mundial, es uno de los nodos principales en la gran red de cadenas de suministros global,  pero ante la crisis sanitaria ha tenido que detener su dinámica de producción manufacturera así como de logística, lo que ha frenado el comercio global. Solamente para dar un dato, en el actual bimestre el comercio marítimo ha impactado en el envío de 1.9 millones de TEUs desde Asia a Norteamérica y Europa, representando una pérdida de ingresos de 1.9 mil millones de dólares para el sector naviero (8). 
 
Esto ha repercutido en una gran cantidad de bienes de consumo, desde aquellos con bajo valor agregado hasta bienes con alto contenido tecnológico, lo que ya se ha empezado a sentir en los mercados, ya que la alta demanda de productos y el consumo excesivo que es propio del sistema capitalista imperante, se ve reflejado en el incremento del costo de varias mercancías. De igual manera se pone en peligro a grandes empresas e inversiones que se han colocado en China, muchas de ellas hoy en día están en baja productividad ya que no pueden tener a todo su personal laborando ni garantizarles la seguridad suficiente para no contagiarse. 
   
Algunas consultoras, como por ejemplo Oxford Economics, predicen que la economía china crecerá menos del 4 por ciento en el primer trimestre de 2020 con respecto al mismo periodo de 2019, lo que sería un crecimiento medio de 5,6 por ciento (9). Ante este tipo de tendencias que son las peores en 30 años, el Banco Central de China ha inyectado 174.000 millones de dólares, con el fin de garantizar la liquidez y contener los efectos negativos de la crisis sanitaria, en donde el gobierno central ha invertido alrededor de 12.600 millones de dólares (10). Sumado a esto los principales bancos de China han decidido recortar las tasas de interés para los créditos personales y de las PYMES localizadas en las regiones más dañadas por la crisis.
 
​Mientras que para otros países que se han vinculado en diversos sectores económicos con China, las medidas restrictivas de movilidad de personas dentro y hacia el exterior, han sido un duro golpe al turismo que depende en gran medida de los turistas chinos (11), los cuales a su vez  ingresaban grandes cantidades de divisas. Esto ha afectado no solamente a países vecinos de China, regiones como Europa y América Latina eran lugares predilectos de visita por parte de los chinos. El sector espectáculos es otro que a nivel global tiene afectaciones, los grandes eventos concurridos de personas han sido cancelados en diversas regiones, a esto se suma las pérdidas en hoteles y la baja demanda en bienes de consumo y otros servicios relacionados.

Conclusiones
La grave crisis sanitaria por la que está atravesando China ha venido a frenar el crecimiento tan dinámico que había tenido en los últimos treinta años, lo que le había permitido colocarse como una de las principales economías del globo, así como el principal motor del comercio internacional, lo que ha afectado a diversos mercados, debido a la interconectividad que la globalización generó en estas últimas décadas.
    
Aunado a esto la crisis humanitaria por la que varias de las regiones de China, en especial la de Wuhan, viven en estos momentos posicionan al COVID-19 como uno de los virus más peligrosos en el siglo XXI, debido a la falta de un tratamiento que sea efectivo y permita contener y resolver la crisis.
    
​¿Estaremos ante una nueva recesión económica?, o ¿será una ruptura para que nuevos polos económicos surjan, ya que al China estar contenida y el mercado tener la necesidad de consumo, hay otras regiones que puedan sustituir al gigante asiático en la gran red de cadenas globales?, ¿será el final del gigante asiático como uno de los polos emergentes del sistema internacional?. Es muy pronto para afirmar este tipo de cuestionamientos, lo que sí es un hecho es que China no se dejará vencer tan fácil, no es la primera vez que se enfrentan a una crisis sanitaria y a lo largo de sus tres mil años de cultura, siempre han sabido salir adelante y no cabe duda que el mundo está esperando que el gran Dragón Rojo se alce de esta crisis y pueda volver a la dinámica económica global imperante en las últimas dos décadas.

(1) Redacción. (2020). El ABC del coronavirus: qué es, cómo se contagia, a quién afecta y cómo se previene. 10 marzo 2020, de CNN en Español Sitio web: https://cnnespanol.cnn.com/2020/03/04/el-abc-del-coronavirus-que-es-como-se-contagia-a-quien-afecta-y-como-se-previene/
(2) CNN Español. (2020). Cronología del coronavirus: así comenzó y se extendió el virus que tiene en alerta al mundo. 1 de marzo 2019, de CNN en Español Sitio web: https://cnnespanol.cnn.com/2020/02/20/cronologia-del-coronavirus-asi-comenzo-y-se-extendio-el-virus-que-pone-en-alerta-al-mundo/
(3) Hegarty, S. (2020). Coronavirus en China: quién era Li Wenliang, el doctor que trató de alertar sobre el brote (y cuya muerte causa indignación). 1 de marzo 2020, de CNN en Español Sitio web: https://www.bbc.com/mundo/noticias-internacional-51371640
(4) Redacción. (2020). Coronavirus: Iran temporarily frees 54,000 prisoners to combat spread. 3 de marzo 2020, de BBC Sitio web: https://www.bbc.com/news/world-middle-east-51723398
(5) Guell, O. (2020). Un fármaco contra el sida tiene éxito en la cura del primer contagio por coronavirus. 3 marzo del 2020, de El País Sitio web: https://elpais.com/sociedad/2020-02-28/un-farmaco-contra-el-sida-tiene-exito-en-la-cura-del-primer-contagio-por-coronavirus.html
(6) Redacción. (2016). La globalización favorece epidemias: UNAM. 10 marzo 2020, de La Jornada Sitio web: https://www.jornada.com.mx/2016/12/15/sociedad/038n3soc
(7) Transpaderne, M. (2020). Las epidemias se triplican por las megaciudades, el clima y la globalización. 10 marzo del 2020, de La Vanguardia Sitio web: https://www.lavanguardia.com/vida/20200310/474080204551/las-epidemias-se-triplican-por-las-megaciudades-el-clima-y-la-globalizacion.html
(8) García. K. (2020). Coronavirus ha frenado 1.9 millones de TEUs a nivel global. 10 marzo 2020, de El Noticiero de Colima Sitio web: https://elnoticieroenlinea.com/coronavirus-afecta-industria-naviera-global-con-1-9-millones-de-teus/
(9) Restivo, N. (2020). Las consecuencias económicas en China y a nivel mundial de la epidemia del coronavirus. 10 marzo 2020, de Página 12 Sitio web: Las consecuencias económicas en China y a nivel mundial de la epidemia del coronavirus
(10) Filas, C. (2020).Coronavirus: China blinda sus mercado con u$1s74.000 millones . 10 marzo 2020, de El Cronista Sitio web: https://www.cronista.com/internacionales/Coronavirus-China-blinda-sus-mercados-con-us-174.000-millones--20200202-0012.html
(11) Redacción. (2020). ¿Cómo impactará el coronavirus en la economía global?. 10 marzo 2020, de La izquierda diario Sitio web: http://www.laizquierdadiario.com/Como-impactara-el-coronavirus-en-la-economia-global
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